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historia, economía, política..
Artículos de Opinión
Una
visión geopolítica en favor del respeto entre naciones, la
integración económica mundial y la armonía con el medioambiente
Autor
Javier Colomo Ugarte
Junio
2014
Centenario del inicio de la
Primera Guerra Mundial
El 28/06/2014,
se cumplen cien años del atentado en Sarajevo que acabaría con la vida del
archiduque Francisco Fernando, heredero del trono austriaco, que daría lugar a
los acontecimientos que desencadenarían la Primera
Guerra Mundial.
El 28/07/1914
Austria-Hungría declararía la guerra a Servia, Rusia decidió apoyar a Servia. El
01/08/1914 Alemania declararía la guerra a Rusia y el 03/08/1914 las tropas
alemanas invadirían Bélgica. En los primeros días de agosto de 1914 Gran Bretaña
y Francia entrarían en Guerra contra Alemania y Austria-Hungría. La
conflagración iría involucrando en función de las políticas de alianzas a otros
países: Japón e Italia se opondrían a Alemania, mientras que Turquía se aliaría
con Alemania.
El final de la
guerra no solamente se dirimió en el frente de batalla sino que principalmente
vino determinada por las revueltas de soldados, obreros y campesinos en Rusia y
en la propia Alemania. En Rusia el rechazo a la guerra propicio la revolución
bolchevique, que selló la paz de Rusia con Alemania, y en Alemania se sucederán
una serie de levantamientos populares que no podrán ser contenidos por el
régimen del emperador Guillermo II. Entre octubre y noviembre de
1918 se
produce la rebelión de la escuadra en Wilhelmshaven; la sublevación de marineros
y trabajadores en la base naval de Kiel, y se forman consejos
revolucionarios de obreros y
soldados en Hamburgo, Hannover, Munich y otras ciudades. El 07/10/1918
se proclama la República en Baviera y en esos días la revolución estalla en
Berlín. El 09/10/1918
abdica Guillermo II y se proclama la República Alemana en la que tendrán un
papel relevante los consejos
populares; el 11 /10/1918
Alemania firmará su primer Armisticio que daría lugar en la semanas siguientes
al final de la Guerra, y culminaría el 18/01/1919 en el Tratado de Versalles.
La Primera
Guerra Mundial fue el resultado de la conformación política y económica mundial
a principios del siglo XX. Los imperios europeos dominaban el mundo
colonialmente, y la prolongada crisis económica iniciada en 1873 les había
llevado a un régimen proteccionista separado por áreas de influencia geopolítica
estancas. La guerra fue el resultado de la disputa de las potencias europeas por
controlar el Centro económico y
político del sistema mundial, pues quien lo controlase, ante la debilidad
política de las colonias, dominaría el mundo.
En 1900 el mundo
tenía 1.634 millones de habitantes de los que 563 pertenecían a Europa,
Norteamérica, y Japón, y 1.071 a los países que constituían la Periferia
del sistema económico mundial; si no se tiene en cuenta la población de
China de 400 millones y la de América Latina con unos 70-80 millones, solamente
unos pocos millones de personas en el mundo no estaban sometidas al régimen
colonial (Cuadro 1).
(Cuadro 1)
Relación de la población bajo régimen colonial con la de
los países con mayor presencia colonial a principios del siglo XX
Fuente: Historia Contemporánea, R. Palmer / J. Colton. Elaboración propia.
Al término de la Primera Guerra
Mundial, cuatro imperios sucumbieron: el Imperio Zarista Ruso fue sustituido por
la revolución bolchevique, el Imperio Otomano se desintegró en varios países, el
Imperio Austro Húngaro fue disuelto y al Imperio Alemán le sucedió la República
de Weimar. A pesar de los cambios experimentados en la relación entre las
potencias europeas de los que Gran Bretaña y Francia fueron las beneficiarias,
la mayor parte del mundo seguía bajo el régimen colonial, y
la Segunda Guerra Mundial sería una
continuidad de la Primera en la disputa por controlar el Centro económico y político Mundial, en la
que Alemania aspiraba a resarcirse de las draconianas condiciones de reparación
de guerra que le impusieron las potencias vencedoras en el Tratado de Versalles,
y que sirvió para crear un resentimiento popular en Alemania que fue
instrumentalizado por los nazis para llegar poder.
La devastación
de ambas guerras fueron las mayores conocidas en la historia, y la raíz de ambas
tuvo un denominador
común, las ambiciones imperiales,
que en la Primera Guerra Mundial se apoyó en las ideologías nacionalistas de
derechas, y en la Segunda Guerra Mundial en el fascismo. La forma ideológica a
través de la que se manifestaron las ambiciones imperialistas tuvieron un papel
relevante, pero no fueron determinantes, sino que lo fue el interés de unas
pocas naciones de dominar el Mundo. En la Primera Guerra Mundial no existía el
fascismo y no por ello fue menos cruel que la Segunda. En la Primera Guerra
Mundial lucharon 65,8 millones de soldados, de los que murieron cerca de 10
millones, y seis millones quedaron discapacitados. Francia fue el país más
afectado proporcionalmente con 1,4 millones de soldados muertos y desaparecidos,
equivalentes a un 10% de la población activa masculina.
En la Primera
Guerra Mundial, los combatientes de la Paz que determinaron el final de la
guerra fueron los movimientos revolucionarios internos, principalmente en Rusia
y Alemania; mientras que en la Segunda Guerra Mundial la Paz se lograría por la
victoria militar de las fuerzas antifascistas.
El proceso
descolonizador durante la segunda mitad del siglo XX que ha dado lugar a la
formación del mosaico de naciones que constituyen actualmente la ONU, y la
emergencia entre estos países de potencias como China, India o Sudáfrica, han
trasformado el mundo actual, dejando históricamente obsoletas las ambiciones
imperialistas de las naciones que propiciaron las dos guerra mundiales. La paz
mundial actualmente descansa en la fortaleza de la soberanía y el desarrollo
económico de las naciones que antaño fueron la
periferia colonial del sistema
político mundial, pues su fortaleza imposibilita a las actuales oligarquías
mundiales herederas de las antiguas potencias imperialistas desencadenar una
guerra global para someter a otras naciones, aunque su tradición imperialista
liderada por EEUU para dominar neo-colonialmente a
las antiguas colonias sigue vigente.
Con independencia
de la ideología que la propicie, mientras existan ambiciones imperiales
mundiales existirá riesgo de una conflagración mundial, por ello, la lucha
contra todo tipo de hegemonía mundial y el respeto entre naciones es la mejor
contribución a la Paz .
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Javier Colomo Ugarte
Doctor en Geografía e Historia
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