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Autor

Seudónimo: Saint Just

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25/09/2012

NOTICIA. La incursión de un avión teledirigido mató el sábado 22/09/2012 a tres personas en la región tribal de Datta Khel, en la provincia de Waziristán del Norte

 

Drones: Terror desde el cielo

El bombardeo de los drones del día 22 en Pakistán coincidió con la visita a Washington de la ministra pakistaní de Relaciones Exteriores, Hina Rabbani Khar, una de cuyas misiones es precisamente demandar el cese de ese programa, a cargo de una división especial de la Agencia Central de Inteligencia (CIA). En lo que va de año Pakistán ha sido blanco de 29 ataques de aviones teledirigidos, los cuales han causado 213 muertes.

Los asesinatos con drones de sospechosos de terrorismo comenzaron en el 2004, pero se intensificaron desde la llegada de Barack Obama al Gobierno. La serie de ejecuciones selectivas entre 2011-2012 formó parte destacada del programa de aviación no tripulada en EEUU, al que se vincula con las ejecuciones de cientos de civiles en el extranjero durante los últimos años.

Un estudio realizado por universidades de Stanford y de Nueva York, en Estados Unidos, basado en entrevistas y sondeos realizados entre la población local pakistaní, revela que el programa de "asesinatos selectivos" con drones a cargo de la CIA causa numerosas muertes entre la población civil pakistaní. Según los datos que recoge este estudio, titulado 'Viviendo bajo drones', por culpa de estos aparatos estadounidenses, desde 2004 en Pakistán fueron asesinados entre unos 470 y 880 civiles, entre ellos, 176 niños. Los autores del informe constatan el pánico que atenaza a la población pakistaní, especialmente en la región tribal de Waziristán del Norte, en el oeste del país, que últimamente ha sido blanco de múltiples ataques estadounidenses.

"La región entera está siendo aterrorizada por la amenaza permanente de muerte desde el cielo afectando a su estilo de vida: los niños están demasiado asustados para ir a la escuela; los adultos temen acudir a bodas, funerales, reuniones de negocios o de cualquier cosa que tenga algo que ver con reunirse en grupos”.

Área drones en Pakistán

El documento establece que los ataques causan traumas emocionales y económicos a los heridos y a sus familiares, mientras se vive en la permanente inquietud de la instalación, por parte de agentes de la CIA, de etiquetas electrónicas sobre las casas de los pakistaníes para atraer a los drones. El estudio argumenta que el Gobierno de Barack Obama no ha revelado bajo qué criterios y factores los militares determinan que una persona es ‘delincuente’ a la hora de ser considerado objetivo de los drones.

La Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, pidió al organismo internacional investigar esos ataques por considerarlos ilegales y responsables de la muerte de civiles inocentes.

La Unión Americana por las Libertades Civiles (ACLU) decidió demandar a la CIA por la negativa de la agencia a cumplir con una solicitud de entregar documentos relacionados con el programa de 'asesinatos selectivos' con drones durante la administración de Barack Obama. Con este paso la ACLU busca "averiguar cuándo, dónde y contra quién los aviones no tripulados pueden ser autorizados.

Drones: Terror desde el cielo

La política de la administración de Obama sobre la actividad de los drones es criminal, pues las ejecuciones desde el aire, se realizan sobre personas imposibles de identificar que son ajusticiadas sumariamente por meras sospechas, sin importar su presunción de inocencia, si están solas o acompañadas, y si quienes les acompañan son adultos o niños. Los crímenes de guerra de EEUU no pueden ser juzgados por ningún tribunal internacional o de otro país, y esta impunidad de la que goza EEUU en el mundo, es la que hace que pueda diseñar y ejecutar todo tipo de acciones militares con desprecio total a la vida de inocentes.

Un gran aparato mediático para silenciar sus crímenes, y cuando no pueden por evidentes, para minusvalorar los mismos, o para despreciar a las victimas tachándolas de pertenecer a pueblos bárbaros y atrasados sirve para justificar las actuaciones criminales. El presidente de Pakistán, Asif Ali Zardari, en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, denunció la mortífera actuación de los drones, y saliendo al paso de las perversas interpretaciones mediáticas occidentales afirmó “que no se insulte más la memoria de los muertos, y no se demonice a las mujeres y los niños inocentes de Pakistán

 

La consideración interesada de gobiernos, medios de comunicación y algunas ONGs occidentales de contabilizar la vulneración de los derechos humanos circunscritas exclusivamente al ámbito de cada país, y no por el total de crímenes que un país comete dentro y fuera de sus fronteras, es un insulto a la razón humana y a los propios derechos humanos, e instalados en esa aberración discursiva, se ha llegado al despropósito de que no contabilicen como actos criminales la muerte de civiles por los denominados efectos colaterales de las guerras, cuando han sido las actuaciones militares de EEUU fuera de sus fronteras, en la primera década del presente siglo, la principal causa de violación de los derechos humanos en el mundo con miles de torturados y encarcelados extrajudicialmente, y decenas de miles de muertos en las guerras de Irak y Afganistán.

Los países de la UE también participan de esa hipocresía contable, por una parte, critican la pena de muerte, y por otra, consideran como “inocentes efectos colaterales” las ejecuciones extrajudiciales de civiles en Afganistán. Por ejemplo, las 140 muertes de civiles efectuadas por un bombardeo en la región afgana de Kunduz el 4 de setiembre de 2009 ordenadas por el coronel alemán Georg Klein, Alemania no lo cuenta en su haber de vulneración de derechos humanos.

Ya va siendo hora que, en un mundo globalizado, los delitos que los gobernantes de un país cometen en otros países o contra otros países sean tenidos en cuenta. ¿Hasta cuándo durará la hipocresía de la supremacía moral de los gobernantes occidentales sobre los que consideran pueblos incivilizados y atrasados por la que se arrogan un derecho para amenazar o atacarlos militarmente? ¿Para cuándo unas reglas universales de respeto entre naciones, donde se ponga fin a las amenazas y las guerras de agresión de Occidente contra las naciones rebeldes a sus dictados hegemónicos? ¿Cuándo se hará realidad el principio de que deben ser los propios pueblos quienes alcancen sus metas de libertad y fraternidad sin imposiciones foráneas? ¿Cuándo la Paz será el valor más preciado de la humanidad?

La ONU, en la apertura de su nuevo ejercicio anual ha comenzado sus debates ¿Estarán estas preguntas presentes en los mismos? ¿Los países del NOAL sabrán ser consecuentes con las resoluciones aprobadas en su última cumbre sobre: soberanía, paz y desarrollo, y hacer de este discurso que representa a la mayoría de la humanidad el alma del quehacer del género humano? 

 

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