07/12/2012
NOTICIA. El
Senado de EEUU ha aprobado el Acta Magnitski que prevé sanciones contra
decenas de funcionarios rusos
La guerra
de los Derechos Humanos entre EEUU y Rusia
El Acta Magnitski
aprobada por el Senado de EEUU es un proyecto de ley sobre sanciones
para vetar la entrada a EEUU de personas sospechosas para Washington de
estar relacionadas con el caso de Serguéi Magnitski, asesor de una
empresa británica con filial en Rusia, procesado por evasión de
impuestos y que murió en noviembre de 2009, según EEUU, por falta de
asistencia médica en un calabozo de Moscú.
Para
que el Acta Magnitski entre en vigor el presidente Barack Obama debe firmarla,
aunque en unas declaraciones realizadas al respecto ya ha dejado clara su
postura.
"Mi
administración seguirá trabajando con el Congreso y nuestros socios en un
intento por apoyar a los que están trabajando para asegurar un futuro libre y
democrático de Rusia y buscará la primacía de la ley y el respeto de los
derechos humanos en el mundo”.
Tras la
decisión del Senado de EEUU, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha
expresado:
"No
queremos olvidar todos los resultados positivos que hemos conseguido en nuestras
relaciones bilaterales con EEUU durante los últimos años con bastantes
esfuerzos. La aprobación por parte del Senado de EEUU del Acta Magnitski tendrá
un efecto muy negativo en las perspectivas de colaboración bilateral. Washington
es plenamente responsable de esto”
"La
decisión del Senado es un espectáculo de un teatro del absurdo, pues todo país
tiene el derecho de no conceder el visado a una persona si lo considera
inapropiado y para ello no se necesita ninguna ley especial”.
“Rusia
no puede aceptar reproches en violaciones de derechos humanos de un Estado que
en el siglo XXI tiene legalizadas oficialmente las torturas y secuestros de
gente por todo el mundo".
De
acuerdo con los diplomáticos, la aprobación del Acta Magnistski es una "venganza"
por la política independiente rusa en la arena internacional.
--------
El jefe
del Comité para Asuntos Internacionales de la Duma Estatal rusa, Alexéi Pushkov,
en declaraciones públicas manifestó:
"Washington
se ha creado un mito como protector de los derechos humanos", "Pero si se
examina lo que hacen los representantes de EEUU en todo el mundo, está claro que
no se sostiene ante la menor crítica. Ellos, por ejemplo, no tuvieron ni una
sola palabra de compasión sobre la población civil, las mujeres y los niños,
asesinados en el último conflicto de Gaza. Nada dijeron los funcionarios
estadounidenses"
Refiriéndose a la aprobación del Acta Magnitski afirmó que "merece una
respuesta de nuestra parte", y que Rusia puede tomar medidas de represalia
con pleno derecho, incluso más severas hacia las personas que violan no solo los
derechos de los ciudadanos rusos en el extranjero, sino los conceptos
universales de derechos humanos. Preguntándose:
"¿Por
qué se nos debe negar el derecho a condenar los asesinatos de civiles en las
guerras, en los estados que están siendo ocupados ilegalmente a pesar de las
normas y reglamentos de las Naciones Unidas, y ataques con drones?".
"Podría
ser una lista bastante grande de personas como, ex empleados de Guantánamo que
están llevando a cabo sus negocios y desean visitar Rusia por la razón que sea.
En este caso -aclaró- "a dicho individuo no se le permitirá la entrada".
"También
podrían ser personas que estuvieron involucradas en la muerte de civiles
inocentes durante las operaciones de la OTAN en Irak y Afganistán, a aquellos
relacionados con la tortura, de las torturas secretas que se practicaban en toda
Europa. También podría ser invocado contra individuos sospechosos de haber
llevado a cabo secuestros en el extranjero".
-------
Según
un informe dado a conocer el pasado mes de octubre por el Ministerio de
Exteriores de Rusia sobre derechos humanos en EEUU, centenares de miles de niños
estadounidenses son víctimas de abuso, en algunos casos, con desenlace letal
(1,6 mil muertes en 2010; los castigos corporales se consideran legales en 19
estados de EEUU, mientras que en algunos centros docentes se practica el
“tratamiento” de menores con electrochoque. En un capítulo aparte el informe
está dedicado a los casos de violencia contra los menores rusos adoptados por
familias estadounidenses.
Citando
ONGs norteamericanas, el informe señala:
Que
“uno de cada 100 policías (estadounidenses) se ve involucrado en abusos,
incluyendo acoso sexual, actos depravados y violaciones”.
Que
“EEUU sigue siendo el país con mayor número de reclusos, que asciende a 2,2
millones de personas.
Que
todavía está pendiente el asunto de prisiones secretas de la CIA en Polonia,
Afganistán, Irak, Tailandia, Marruecos, Yibuti, Rumania y Lituania.
Los
autores del informe critican asimismo las leyes de EEUU que permiten a los
servicios secretos realizar inspecciones de toda clase de correspondencia
electrónica tanto de extranjeros como de ciudadanos estadounidenses sin orden
judicial lo que se tradujo en un drástico aumento en un 3.000% entre 2004-2007,
de los mensajes electrónicos revisados por los autoridades.
-------
Recientemente, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguei Lavrov, propuso a
la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) mejorar sus
estándares en materia electoral.
Lavrov,
en una reunión ministerial de la OSCE en Dublín, recordó que en 2012 se
celebraron comicios en muchos países, en particular, Rusia, EEUU, Francia,
Bielorrusia, Kazajstán y Ucrania.
Acusó a
la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos de la OSCE, de
aplicar un doble rasero en su labor de observación electoral”. “Al haber
enviado centenares de observadores a unos países, y apenas unos cuantos a otros.
Señalando que los mismos hechos en países diferentes han sido objeto de
evaluaciones diferentes”,
Y,
propuso realizar un análisis comparativo de las leyes electorales en todos los
países de la OSCE y elaborar unas reglas de observación electoral que no dejen
cabida al doble rasero.
Esta
guerra de los Derechos Humanos entre EEUU y Rusia es, en el caso de Rusia, una
guerra defensiva para combatir el doble
rasero a la hora de enjuiciar los
derechos humanos en el mundo y en cada nación en particular.
En el
caso occidental, el doble rasero,
forma parte de su cultura instalada entre la intelectualidad y los grandes
medios de comunicación, es la hipocresía por la que pretenden crear una supuesta
supremacía moral sobre el resto de naciones del mundo para justificar que, sus
agresiones contra terceros países en nombre de los “Derechos Humanos” está por
encima de los principios fundacionales de las Naciones Unidas de respeto entre
naciones.
En el
fondo, con distinta cara, es el mismo discurso de los viejos imperios coloniales
que justificaron con la propaganda de llevar la avanzada civilización occidental
a los pueblos atrasados, lo que en realidad era pura expansión militar, política
y económica, y ahora, lo hacen bajo el ardid propagandístico de los derechos
humanos, cuando luego sus guerras como: en Afganistán, Irak o Libia, solo traen
torturas, muerte y destrucción.
El
objetivo de este falaz discurso occidental es debilitar
el espíritu de la soberanía de las
naciones que aspiran a su emancipación neocolonial y cultural. El recurso
propagandístico consiste en erigirse en el poseedor de la moral universal que
con una buena dosis de maniqueísmo convierte en perversos a los que, por
designio de este autoarrogado poder moral mundial occidental, no acatan sus
dictados..
El
aparato mediático occidental que abarca todo el planeta se corresponde con su
objetivo de alcanzar la hegemonía mundial. Sería impensable que EEUU que tiene
un presupuesto militar mundial que representa el 42% de los gastos militares del
mundo no tuviera un aparato mediático acorde con el mismo. Aunque la cuestión
es, una vez finalizada la Guerra Fría, ¿para qué precisa EEUU tal maquinaria
militar?, y ¿para qué sirve la OTAN? Los estrategas occidentales inmersos en su
herencia histórica neocolonial, no se harán estas preguntas, pero el mundo está
cambiando y, tal vez, su persistencia en no adaptarse al paso de los tiempos,
que exige de la colaboración entre naciones en lugar de la confrontación, les
irá aislando, mientras que los países emergentes basados en los principios de paz
y desarrollo e integración irán
liderando a la mayoría de la humanidad.
Pero
por el momento, para Occidente nada está cambiando. Las diatribas de Obama de
velar por los derechos humanos en Rusia, y de Occidente en general en el mundo,
solo son ambiciones hegemónicas neocoloniales justificadas en una propaganda por
la que, las democracias liberales occidentales por el hecho de serlo, poseen el
derecho para amenazar a otros países o llevar a cabo actos criminales, los
cuales, los gobernantes occidentales, envueltos en su capa de cinismo, no
consideran flagrante vulneración de los derechos humanos porque los ejecutan
fuera de sus fronteras, bien sea en Afganistán o Pakistán o, en otros casos,
miran para otro lado, como lo hacen Merkel y Obama cuando dicen apoyar al
régimen de Israel porque es la “única democracia en la región” a la cual le
otorgan el derecho del asesinato indiscriminado si lo hace fuera de sus
fronteras, en un injustificado y cínico derecho a la defensa de quienes
realmente son los agredidos: los palestinos.
Los
medios de comunicación e intelectuales occidentales nunca hablan de la
dignificación de la soberanía de las naciones y de los principios básicos de la
ONU basados en el respeto entre naciones, cuando
son los valores más importantes para avanzar en la universalización de los
derechos humanos ha través del diálogo entre naciones, y
los ignoran porque en el fondo desprecian el valor del diálogo, pues lo que
Occidente pretende no es la colaboración sino la subordinación de las naciones a
través de la sumisión cultural y política y de las armas cuando es preciso, como
se vio en Libia o maquinan en Siria.
La dignidad
de la soberanía parece que es un
derecho que solamente pueden tenerlo los países occidentales pero no el resto de
países del mundo. Esta dignidad negada por occidente a las naciones en
desarrollo, lo es, porque en la medida que las naciones aumentan su
dignificación en soberanía, menos pueden ser sometidas.
Para
pesar de Occidente es lo que está pasando en los países latinoamericanos,
también en algunos de Oriente Medio, y en los países emergentes, particularmente
de Rusia, a quien no perdona que quiera caminar con paso propio.